POR JOSÉ GUADERRAMA
LANOTA.– Fue al más puro estilo de una masacre estadounidense. El encapuchado que mató a un joven en el CCH Sur e hirió a una persona más anunció su crimen en redes sociales horas antes, según testimonios recogidos en chats de la comunidad estudiantil.
Su sudadera negra tenía la leyenda “Bloodbath”, baño de sangre. Pueden verse dos navajas de punta de luna, un pico de escalador, guantes, lentes y una máscara. Todo bajo la firma de Lex Ashton en Facebook.
EL TERROR LLEGÓ AL CCH SUR
Una maestra del CCH narró la brutal tragedia: La tarde del lunes 22 de septiembre, el CCH Sur de la UNAM se transformó en un escenario de violencia y miedo. Alumnos y trabajadores fueron testigos de un ataque mortal que dejó un saldo trágico.
“Hola chavos, les comparto de primera mano lo que sucedió porque yo estaba saliendo en el estacionamiento y estuve con Guadalupe Roy mero Acevedo (la novia del chico asesinado)”, contó.
EL ATAQUE
El agresor, un alumno del plantel, portaba maquillaje de payaso a manera de máscara y estaba encapuchado. Se acercó directamente a Javier Hernández, quien estaba sentado en la banca comiendo lagrimitas con su novia.
“Comenzó golpeándolo y después sacó un cuchillo y lamentablemente lo apuñaló en el cuello y dos veces en el abdomen, ante la presencia de su novia Guadalupe, quien comenzó a gritar y a pedir auxilio”, narró la testigo.
El atacante incluso intentó golpear a la chica, pero ella logró defenderse y salir corriendo mientras gritaba e intentaba atraparlo.
INTERVENCIÓN DEL PERSONAL
Un empleado de mantenimiento que quiso detener al agresor también fue atacado. “Fue herido y trasladado al hospital”, precisó la testigo.
El agresor, al verse acorralado por varias personas que lo perseguían, se lanzó del tercer piso del edificio IM y se fracturó ambas piernas. La abogada del plantel lo trasladó al hospital, pese a que trabajadores exigían que fuera llevado al Ministerio Público en calidad de detenido. Incluso hubo otro conato de pelea dentro de la ambulancia.
CONSECUENCIAS TRÁGICAS
El ataque dejó un saldo mortal: Javier Hernández perdió la vida. La comunidad del CCH Sur se encuentra consternada.
“Tristemente, el ataque para el alumno de tercer semestre fue mortal. Estamos de luto. Me siento muy triste”, confesó la testigo.
La violencia se vinculó directamente con la falta de programas de salud mental y prevención de la violencia dentro del plantel.
“Fue algo inesperado, pero producto de una mala gestión del alumnado y falta de programas reales que nos apoyen a cuidar la salud mental y a prevenir la violencia en medio de tanta masificación escolar”, añadió.
LLAMADO A LA REFLEXIÓN
Entre lágrimas y dolor, la comunidad hace un llamado a recordar a Javier y a reflexionar sobre la prevención de estos hechos.
“Sin más, les envío un abrazo con todo mi cariño. Y por favor, les pido una oración por el alma de Javier. Estaremos en contacto. Los quiero. Gracias por preocuparse por mí”, concluyó la testigo.
El CCH Sur queda marcado por esta tragedia, recordando que incluso los espacios educativos pueden ser escenarios de violencia cuando se descuida la atención emocional y la seguridad de los estudiantes.
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