Casas incendiadas y drones armados: la nueva cara de la violencia en Sinaloa

La última semana de octubre, Culiacán y las montañas de Badiraguato vivieron una escalada de violencia sin precedentes. La disputa entre facciones del Cártel de Sinaloa —Los Chapitos y El Mayo Zambada— derivó en al menos 10 ataques directos a viviendas, incluyendo incendios y drones explosivos. La ciudad quedó sumida en el miedo tras la muerte de Fátima Guadalupe, de 14 años, y el desplazamiento de familias. Autoridades reforzaron la vigilancia con Ejército y Guardia Nacional, pero el terror persiste entre los habitantes, atrapados en una guerra que no eligieron