La fama y un buen padrino le han eximido a Cuauhtémoc Blanco de una tarjeta roja.
LANOTA.MX. El ascenso meteórico de Cuauhtémoc Blanco a la política fue impulsado por su fama como exfutbolista, con Morena viéndolo como una figura que podría atraer votos por su carisma y su éxito en el campo.
En 2018, su candidatura a la gubernatura de Morelos fue un triunfo arrasador, sin embargo, poco después de asumir el cargo, su carrera política se vio envuelta en una serie de escándalos y acusaciones que lo colocaron bajo la lupa de la opinión pública.
Entre estas acusaciones, destaca la denuncia de abuso sexual en grado de tentativa interpuesta por su media hermana, Nidia Fabiola Blanco. El incidente, que se habría producido en la residencia oficial del estado de Morelos, ha puesto en evidencia una vez más la contradicción del sistema político mexicano: en nombre de los derechos de las mujeres a una vida sin violencia, los mismos actores políticos parecen dar protección a figuras públicas acusadas de violencia, garantizando su impunidad.
UN ASCENSO IMPULSADO POR LA FAMA
En 2018, el entonces exfutbolista fue lanzado a la arena política con el respaldo de su fama en el fútbol. Morena, en busca de un rostro popular que pudiera atraer al electorado, apostó por Cuauhtémoc Blanco, quien ganó la gubernatura de Morelos con facilidad. Sin embargo, este ascenso no estuvo exento de controversias.
Durante su mandato, Blanco ha sido señalado por múltiples irregularidades, desde desvíos millonarios hasta acusaciones de abuso de poder, que jamás han sido aclaradas de manera satisfactoria.
EL CASO DE ABUSO SEXUAL: UNA ACUSACIÓN GRAVE QUE QUEDA EN SUSPENSO
En diciembre de 2023, la denuncia de abuso sexual presentada por su media hermana ante la Fiscalía de Morelos generó una ola de reacciones. Blanco ha negado las acusaciones rotundamente, pero su respuesta no ha sido suficiente para acallar las voces que exigen justicia.
En lugar de centrarse en las víctimas, como dictan los principios de cualquier sistema democrático y justo, Cuauhtémoc Blanco, con su desmedida confianza, ha decidido victimizarse. “No se vale lo que están haciendo hacia mi persona, destruyendo mi imagen”, comentó en su defensa, mientras anunciaba que propondría una iniciativa para que los hombres pudieran defenderse ante acusaciones de abuso sexual.
Las palabras de Blanco no son solo una muestra de su falta de empatía, sino una clara tergiversación del tema central: las mujeres siguen siendo las principales víctimas de violencia sexual y, en lugar de ofrecerles una voz y un camino para la justicia, lo que propone el exfutbolista es una medida que pone en duda la veracidad de las acusaciones y revic
IMPUNIDAD EN EL QUE TODOS GANAN… MENOS LAS MUJERES
El caso de Cuauhtémoc Blanco refleja la preocupación de un sector de la sociedad, que se ve cada vez más enojado con un sistema que, por un lado, pregona la defensa de los derechos de las mujeres, pero por el otro, apoya y protege a quienes son acusados de violencia de género.
“No se puede seguir permitiendo que los hombres poderosos continúen disfrutando de un fuero que les permite violar los derechos de las mujeres sin consecuencia alguna”, señalaron diputadas de Morena en una muestra de inconformidad ante la postura del exgobernador. A pesar de sus reclamos, la respuesta del sistema político ha sido tibia, y Blanco ha seguido avanzando en su carrera sin que se haya tomado acción contundente frente a las acusaciones que lo rodean.
“LA HISTORIA SE CUENTA SOLA”
El fiscal de Morelos, Uriel Carmona, fue uno de los pocos en hablar abiertamente sobre las investigaciones que pesan sobre Blanco, revelando que existen al menos diez carpetas de investigación. “La historia se cuenta sola”, declaró Carmona en un tono que reflejaba la gravedad de las acusaciones. Sin embargo, a pesar de las pruebas y las voces que piden justicia, Blanco sigue siendo una figura protegida por su estatus político.
Lo más alarmante de este caso es la contradicción en la que se encuentra el sistema político mexicano. Por un lado, se pregona la lucha por los derechos de las mujeres, pero por el otro, se le sigue permitiendo a Cuauhtémoc Blanco –y a otros acusados de violencia– disfrutar de las mieles del poder sin enfrentar las consecuencias de sus actos.
- Ejecutan a exdiputado del PRI dentro de un Starbucks en Zapopan
- Reviven videos de gobernadoras de Morena al micrófono cantando corridos
- ¿Autos baratos en internet? Cuidado: pueden asaltarte al intentar comprarlos
- Con maletas llenas de dinero: así cruzó la familia de Ovidio a EU por pacto
- Revocación de visa: Intento de control de daños de Marina del Pilar genera más confusión
Alfonso Ramírez Cuéllar, exlíder del Barzón, se ha sumado a las voces que piden la derogación del fuero, aludiendo a que no es justo que figuras como Blanco continúen en la política a pesar de las graves acusaciones que enfrentan. La realidad es que el fuero no solo protege a políticos como Blanco, sino que también contribuye a la perpetuación de un sistema en el que las mujeres no pueden estar seguras ni siquiera en los círculos más altos del poder.
LA IMPUNIDAD DE BLANCO: UN LAMENTO PARA LAS MUJERES
El caso de Cuauhtémoc Blanco es solo uno de muchos que revelan la lucha constante de las mujeres por obtener justicia en un país donde la impunidad parece ser la regla, y no la excepción. Mientras el exfutbolista se sigue burlando de las leyes y las acusaciones, las mujeres siguen siendo las que cargan con el peso de una sociedad que, aunque dice defender sus derechos, no toma las medidas necesarias para garantizarles una vida libre de violencia.
¿HASTA CUÁNDO?
La pregunta que persiste, ante este panorama tan alarmante, es: ¿hasta cuándo las mujeres seguirán siendo las víctimas en un sistema que protege a los hombres poderosos y que permite que figuras públicas como Cuauhtémoc Blanco sigan encumbradas a costa de la dignidad y la justicia? Mientras el exgobernador avanza en su carrera política y el sistema se vuelve cada vez más indiferente, las mujeres deben seguir luchando por lo que les corresponde: vivir sin miedo y con la garantía de que sus derechos serán respetados.
Síguenos en @LaNotaDeMéxico