Colectivos y autoridades chocan por hornos crematorios en el rancho Izaguirre

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Pocket
WhatsApp
Huesos encontrados en el Rancho Izaguirre.

LANOTA.MX. El caso del rancho Izaguirre en Teuchitlán, Jalisco, ha generado un intenso debate entre colectivos de búsqueda y autoridades, luego de que estos últimos negaran la existencia de hornos crematorios en el predio, a pesar de las evidencias presentadas por los grupos civiles.

LA POSTURA DE LAS AUTORIDADES

En su primer informe técnico, la Fiscalía General de la República (FGR) señaló que “no hay elementos suficientes” para inferir que el rancho Izaguirre haya sido utilizado como un “campo de exterminio”

El titular de la Fiscalía del Estado de Jalisco, Salvador González de los Santos, descartó la existencia de estructuras que funcionaran como hornos crematorios, aunque confirmó la presencia de habitaciones, baños, cocinas, bodegas y áreas de adiestramiento táctico.

Además, el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, reconoció que se encontraron restos humanos en el lugar, pero advirtió que estos “todavía no están definidos técnicamente”.

“No hay un dictamen concluyente. Sí encontraron una serie de osamentas, pequeños trozos. El dictamen que nos hace llegar la fiscalía no garantiza la credibilidad y las características específicas de restos óseos; pero de que encontraron, encontraron”, declaró Gertz Manero.

LA EVIDENCIA DE LOS COLECTIVOS

Por su parte, el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco sostiene que hay “evidencia clara y contundente” sobre la existencia de crematorios clandestinos en el rancho Izaguirre. A través de sus redes sociales, el grupo compartió videos del 5 de marzo de 2025, donde se observan restos calcinados y estructuras que, según ellos, fueron utilizadas para incinerar cuerpos.

“A diferencia de lo que algunos han dicho, estos crematorios tienen una base de ladrillo y piedra, que claramente se alcanzan a ver y fueron utilizados para calcinar cuerpos. La evidencia es clara y contundente”, afirmó el colectivo en sus publicaciones.

Indira Navarro, representante del grupo, explicó que los hornos localizados no son convencionales, sino agujeros cavados de aproximadamente un metro de profundidad, con una base de piedras, rocas o ladrillos, donde se incineraban los cuerpos antes de cubrirlos con tierra.

“Desde un inicio dijimos que no eran hornos como los que estamos acostumbrados a ver, esta era una forma muy diferente de operar. (…) Después de quemar, cubrían con tierra. Hay más, seguirán saliendo más”, declaró Navarro a la revista Proceso.

El colectivo también destacó que las cubetas llenas de huesos y restos óseos recolectadas por peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) son otra prueba de que el rancho era utilizado como un crematorio clandestino.

“Durante dieciséis días que han transcurrido, hemos esperado incansablemente para descubrir la verdad. No es un montaje, no es una invención. Es la cruda realidad que hemos encontrado en Teuchitlán. Queremos que la verdad sea conocida y que se haga justicia por las víctimas”, agregaron.

EL DEBATE CONTINÚA

Mientras las autoridades insisten en que no hay pruebas concluyentes sobre la existencia de hornos crematorios, los colectivos mantienen su postura y exigen que se profundice la investigación.

Este caso ha puesto en evidencia la desconfianza entre los grupos civiles y las instituciones, así como la urgencia de transparencia en uno de los hallazgos más impactantes relacionados con la violencia y el narcotráfico en México.

¿Qué hay realmente en el rancho Izaguirre? La respuesta aún está pendiente, pero lo que es claro es que las víctimas y sus familias merecen justicia.

Síguenos en @LaNotaDeMéxico

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Pocket
WhatsApp