LANOTA. Lo que debía ser una jornada de alegría y convivencia escolar terminó en alarma y hospitalizaciones. Al menos 14 menores de edad, entre 6 y 10 años, resultaron intoxicados durante los festejos del Día del Niño en el ejido San Diego, municipio de Eldorado, Sinaloa.
El evento, organizado por la primaria Francisco I. Madero el pasado 30 de abril, culminó con varios niños mostrando síntomas de intoxicación: ampollas en la lengua, resequedad en la boca, inquietud, hiperactividad e incluso alucinaciones, según reportaron padres de familia a medios locales.
EVALUACIÓN MÉDICA Y POSIBLE SUSTANCIA
Ante la gravedad del cuadro clínico, los menores fueron trasladados a distintos hospitales del estado para su evaluación. El secretario de Salud de Sinaloa, Cuitláhuac González, confirmó que las primeras pruebas de laboratorio arrojaron un hallazgo preocupante: posible presencia de anfetamina en el organismo de los niños.
“En total fueron 14 niños los que recibieron atención médica. Efectivamente, ya salió durante la noche el reporte del laboratorio el cual nos dice que al parecer es una anfetamina, la cual condicionó la intoxicación y por lo cual tuvieron que recibir atención médica. Afortunadamente los niños se encuentran sanos y salvos, se encuentran estables, se dieron de alta a sus casas con sus familias”, informó el funcionario.
Del total de afectados, tres menores requirieron hospitalización: dos fueron internados en una clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y una niña fue atendida en el Hospital Pediátrico de Sinaloa. Los once restantes fueron tratados de forma ambulatoria y dados de alta el mismo día.
SOSPECHAS SOBRE ALIMENTOS Y EXIGENCIAS DE LOS PADRES
El origen de la intoxicación aún no está claro, pero los padres de familia apuntan a los alimentos y bebidas consumidos durante el convivio escolar. Según señalaron, durante el evento se ofrecieron tacos de carne asada, aguas frescas, frutas y nieves. De todos estos insumos, únicamente el servicio de taquiza y las nieves fueron contratados con proveedores externos; el resto fue preparado por personal de la escuela.
Queremos saber qué pasó. Hasta que se investigue, no mandaremos a nuestros hijos a la escuela“, advirtieron padres visiblemente molestos.
Por su parte, la Secretaría de Salud estatal indicó que será la Fiscalía General del Estado la encargada de investigar y esclarecer los hechos. Mientras tanto, la incertidumbre y el miedo se apoderan de la comunidad escolar de San Diego, que aún no entiende cómo una celebración infantil pudo derivar en un episodio tan grave.
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