Aunque se presenta como una solución para combatir la impunidad, esta reforma debilita el debido proceso, refuerza prácticas abusivas y atenta contra los derechos humanos, dejando a los más vulnerables aún más desprotegidos.
CASTIGO ANTICIPADO
La prisión preventiva oficiosa, o “prisión sin juicio”, es una medida para encarcelar a personas acusadas de ciertos delitos antes de ser juzgados.
Esto incluye la presunción de que son culpables, sin que un juez pueda considerar alternativas como medidas cautelares o evaluar si realmente existe riesgo de fuga.