LANOTA.– Un operativo internacional encabezado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos reveló un oscuro entramado que podría haber armado al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) con ametralladoras, granadas, misiles tierra-aire y drones de combate.
Según la acusación formal emitida en el Distrito Este de Virginia, cuatro ciudadanos extranjeros diseñaron un plan para suministrar armamento militar al grupo liderado por Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”.
Desde febrero de 2025, el CJNG es considerado una organización terrorista extranjera por el gobierno de Donald Trump, lo que eleva la gravedad del caso. La acusación no solo apunta a tráfico de armas y drogas, sino a una supuesta conspiración internacional para apoyar materialmente al terrorismo.
UNA RED GLOBAL PARA ARMAR A UN CÁRTEL
Los señalados son Peter Dimitrov Mirchev (Bulgaria), Elisha Odhiambo Asumo (Kenia), Michael Katungi Mpeirwe (Uganda) y Subiro Osmund Mwapinga (Tanzania). Desde septiembre de 2022, esta red habría comenzado a operar simulando transacciones legales de armamento mediante certificados falsos de usuario final (EUC), supuestamente emitidos por Tanzania.
La fachada permitió enviar desde Bulgaria un lote inicial de 50 fusiles AK-47 con cargadores y municiones rumbo a México. El arsenal total ―valorado en 58 millones de dólares― incluía equipo bélico de nivel militar: rifles de francotirador, lanzacohetes, minas antipersonal, visores nocturnos, lanzagranadas y sistemas antiaéreos.
Los acusados tuvieron contacto directo con agentes encubiertos que se hicieron pasar por miembros del CJNG. Mirchev, con un historial ligado al traficante internacional Viktor Bout, coordinó las negociaciones desde Europa. Sus cómplices colaboraron falsificando documentos y ocultando el verdadero destino del armamento.
CAPTURAS Y CONSECUENCIAS
Las detenciones ocurrieron el pasado 8 de abril de 2025. Mirchev fue arrestado en Madrid, España, y espera su extradición. Asumo fue capturado en Casablanca, Marruecos; Mwapinga, en Acra, Ghana; mientras que Mpeirwe continúa prófugo. La pena para estos delitos oscila entre 10 años de prisión y cadena perpetua.
El caso fue anunciado por el fiscal federal Erik S. Siebert y Louis A. D’Ambrosio, jefe de Operaciones Especiales de la DEA, con respaldo de agencias policiales de Grecia, Ghana, España y Marruecos.
INTRIGA Y ESCALADA INTERNACIONAL
Este caso se da en un contexto tenso entre México y Estados Unidos, donde la designación del CJNG como grupo terrorista ha reconfigurado la cooperación bilateral. El mismo día, Donald Trump y Claudia Sheinbaum sostuvieron una llamada para discutir temas comerciales, mientras en paralelo se desata una acusación que coloca al CJNG como una amenaza global, no solo nacional.
El expediente judicial sugiere que, de no haberse frenado, la operación habría convertido al cártel en una fuerza paramilitar capaz de enfrentar con tecnología avanzada a sus rivales, e incluso al Estado mexicano.
El mensaje es claro: la frontera del narcotráfico ya no es solo geográfica ni económica. Se extiende al terreno del terrorismo y la guerra no declarada. Y el CJNG parece haber estado listo para cruzarla.
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