LANOTA.– La tragedia en el Puente La Concordia, donde un autotanque de SISA Gas explotó el 10 de septiembre y 30 personas perdieron la vida, puso de relieve algo que era evidente desde hace años: en México, el transporte de gas LP circula prácticamente sin control real.
Tras el siniestro, la presidencia anunció un paquete de normas de emergencia que entrarán en vigor el 3 de octubre: la NOM-EM-006-ASEA-2025 y la NOM-EM-007-ASEA-2025, elaboradas por la Sener y la ASEA. Las empresas tendrán cuatro meses para cumplir.
NUEVAS REGLAS, VIEJOS PROBLEMAS
Entre los requerimientos destacan:
- Mantenimiento anual obligatorio certificado ante la ASEA.
- Pruebas periódicas a tanques y sistemas de seguridad, incluyendo presión hidrostática.
- Capacitación certificada de conductores avalada por el Conocer.
- Monitoreo digital con GPS y control de velocidad.
- Código QR de identificación para cada unidad, emitido por la Sener.
Cualquier vehículo sin QR será sujeto a multas y sanciones. Según Sheinbaum, ahora habrá “inspecciones reales”. Pero la pregunta es: ¿por qué no se hicieron antes?
EL DESASTRE QUE EXPONE LOS VACÍOS LEGALES
El autotanque explotó en plena hora pico, en una de las zonas más pobladas de la capital. Entre las víctimas estaba la “abuela heroica”, quien murió intentando salvar a su nieta.
El hecho dejó al descubierto la insuficiencia histórica de la regulación: no hay una norma federal que limite horarios o rutas de circulación para vehículos que transportan materiales peligrosos. La Ley del Gas LP y la NOM-007-SESH-2010 regulan aspectos técnicos, pero no prevén medidas concretas para proteger a la población en entornos urbanos densos.
En la Ciudad de México, el Reglamento de Tránsito establece rutas y horarios, pero solo se aplican de manera parcial y excepcional.
UN SECTOR EN RIESGO
- 31,946 autotanques circulan en el país con capacidad para 107 millones 967 mil litros de gas LP.
- En la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) hay unas 3,000 pipas, de las cuales al menos el 10% distribuyen gas de origen ilícito, según exfuncionarios de protección civil.
- El mercado está concentrado en pocas empresas, principalmente en Nuevo León, Estado de México, Sonora y Puebla.
A pesar de la magnitud del sector, el control era mínimo hasta la explosión de Iztapalapa.
EL QR: UNA SOLUCIÓN TARDÍA
El nuevo código QR servirá para identificar en segundos si un vehículo está autorizado y cumple con las normas. La Sener será responsable de emitir y entregar los códigos. Su ausencia o falsificación implicará multas y sanciones.
Es un paso adelante, pero llega después de 30 muertes, y no reemplaza la necesidad de regular horarios, rutas y operaciones en zonas densamente pobladas.
EL GRAN DESAFÍO
El gobierno ahora pretende monitoreo en tiempo real y control más estricto, pero los especialistas advierten: mientras no se legisle sobre circulación urbana, el riesgo de explosiones mortales seguirá latente.
En pocas palabras: fueron necesarias 30 víctimas para que se recordara que las pipas de gas LP no pueden operar sin supervisión efectiva.
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