Horror en el monte: hallan campo de exterminio en Díaz Ordaz, Tamaulipas

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Pocket
WhatsApp
Se hallaron restos de tambos calcinados y restos óseos.

LANOTA.-  En un rincón rural de Tamaulipas, muy cerca de la frontera con Reynosa, el silencio fue interrumpido por un descubrimiento aterrador. Restos óseos calcinados, estructuras de fogatas y un tambo metálico con rastros de combustible revelaron la existencia de un presunto campo de exterminio, localizado en el ejido Arturo Flores, municipio de Díaz Ordaz.

El hallazgo fue posible gracias a una denuncia anónima, que el colectivo Amor por los Desaparecidos, conformado mayoritariamente por madres buscadoras, tomó con seriedad. Su presidenta, Edith González, informó que, tras recibir el aviso, solicitaron apoyo de autoridades federales y estatales debido a la complejidad del terreno y los riesgos en la zona.

La primera inspección se realizó el martes. Fue hasta el día siguiente que se confirmaron los indicios de un sitio utilizado para la incineración de cuerpos humanos. La escena fue escalofriante: huesos calcinados, posibles restos humanos, fogatas improvisadas y el clásico tambo metálico que, según las autoridades, suele utilizarse para deshacerse de cuerpos con fuego y combustibles.

LOS METROS Y EL CONTROL TERRITORIAL

El ejido donde se realizó el hallazgo es una región bajo disputa criminal, territorio conocido por la operación de Los Metros, una violenta célula del Cártel del Golfo. La zona, entre Díaz Ordaz y Reynosa, ha sido marcada por años como ruta estratégica para el tráfico de personas, drogas y vehículos robados.

Aunque no hay confirmación oficial del grupo responsable, los indicios y la presencia criminal en la región apuntan a que el sitio pudo haber sido utilizado por esta célula para desaparecer personas. En Tamaulipas, se habla ya de otros posibles puntos similares que se mantienen bajo investigación.

OPERATIVO MULTINIVEL

Al operativo acudieron elementos del Ejército Mexicano, la Guardia Nacional, la Guardia Estatal, personal de la Comisión Nacional de Búsqueda, la Comisión Estatal de Atención a Víctimas, agentes de la Fiscalía de Tamaulipas y binomios caninos especializados.

Todo indica que el campo habría estado activo hasta hace poco, aunque aún se trabaja para determinar cuántas víctimas podrían haber pasado por ese infierno.

LA PERSISTENCIA DEL HORROR

Mientras en la región se despliegan esfuerzos para frenar al crimen organizado, la violencia no cede. En días recientes, tres sujetos fueron detenidos en Tamaulipas, uno de ellos, Santos “R”, alias M-47, señalado como jefe de plaza del Cártel del Golfo y presunto autor intelectual del secuestro y homicidio de miembros del grupo musical Fugitivo.

Aunque esa detención ocurrió en otro punto del estado, para los colectivos como Amor por los Desaparecidos, la violencia sigue teniendo un rostro y un peso insoportable: el de sus seres queridos que no han regresado a casa.

El hallazgo en Díaz Ordaz es apenas un capítulo más en la larga y dolorosa búsqueda de justicia que las familias tamaulipecas enfrentan cada día, en un estado donde los muertos aún claman por ser encontrados.

Síguenos en @LaNotaDeMexico

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Pocket
WhatsApp